Eli García: Hola Crossroads. Mi nombre es Eli, y ella es mi esposa Mandy. Y con nuestros tres hermosos hijos servimos aquí en Ministerios Vida Nueva en Piedras Negras, México.
Mandy García: Desde que era niño, recuerdo a Crossroads apoyando a Vida Nueva, y también recuerdo innumerables viajes misioneros a través de los años. De hecho, mi padre, Jair Castillo fue ordenado por su congregación en 1984.
Y aunque Dios ha hecho cosas extraordinarias en los últimos 35 años....
Eli García: Su apoyo ha contribuido en la misión de Vida Nueva de romper el ciclo de la pobreza a través de Cristo de muchas maneras. Desde programas de comida abierta, uh, ser un hogar de niños, la ejecución de clínicas médicas, y mucho, mucho más. Ahora, hemos mezclado en dos aspectos del ministerio para avanzar en esta misión, la difusión del evangelio a través de la plantación de iglesias y romper el ciclo de la pobreza a través de la calidad, la educación centrada en Cristo.
Mandy García: Nuestra escuela, Antonio Medina Gaona, es realmente única. Hay mucho espacio para que los niños corran, jueguen y crezcan en un ambiente positivo. Actualmente tenemos 470 alumnos, desde preescolar hasta bachillerato, y estamos plenamente acreditados por el gobierno mexicano.
Con su apoyo, tenemos una oportunidad única para servir a la comunidad de bajos recursos de El Ejido, Piedras Negras. Con una educación de calidad y asequible para los niños para romper el ciclo de la pobreza, pero sobre todo tenemos la oportunidad de compartir las buenas nuevas de Jesucristo, no sólo con los estudiantes, sino también con sus padres a través de servicios de capilla mensuales y conectarlos a nuestra última planta de la iglesia, Iglesia Nueva Historia.
Eli García: Esta es la otra área del ministerio que su apoyo nos permite lograr: la plantación de iglesias. Después de la primera iglesia fue, fue plantada y construida, eh, hemos sido capaces de plantar y apoyar a ocho nuevas iglesias en todo México e incluso uno en la ciudad de Kansas. Realmente no podemos medir el impacto que VNM ha tenido a lo largo de los años.
A medida que los nuevos creyentes se convierten en discípulos y, a su vez, llegan a más no creyentes, desempeñamos un pequeño papel en el cumplimiento de la Gran Comisión. Gracias. Uh, gracias por su apoyo a Vida Nueva y a través de sus oraciones y contribuciones financieras, uh, varios viajes misioneros y, y por alentarnos y animarnos a ir a hacer discípulos y seguir rompiendo el ciclo de la pobreza y la vida de tantas personas en nuestro querido México.
Ambos: Gracias.